Madre Teresa de Calcuta |
Agnes Gonxha Bojaxhiu (que significa «capullo de rosa» o «pequeña flor» en
albanés), nació en Skopj, actual Macedonia en 1910 y murió en Calcuta en
1997.
Su padre, que estaba involucrado en la política de Albania, murió repentina
y misteriosamente en 1919 cuando Agnes contaba con apenas ocho años tras
ser trasladado al hospital, por causas desconocidas, aunque se cree que
fue a causa de un envenenamiento. Tras la muerte de éste, su madre la educó en
el seno de la religión católica.
De niña asistió a la escuela estatal y participó como soprano solista del
coro de su parroquia y, en ausencia del director, se encargaba de la dirección
del grupo. Pertenecía, además, al Sodalicio de Nuestra Señora, donde comenzó a
interesarse por las historias de los misioneros jesuitas de Yugoslavia que
estaban en Bengala.
A la edad de cinco años recibió su Primera comunión y a los seis, la
Confirmación, con doce años ya estaba convencida de que debía dedicarse a la
religión.
El 26 de septiembre de 1928 con dieciocho años abandonó para siempre su
ciudad natal y viajó hasta Dublín para profesar en la Congregación de Nuestra
Señora de Loreto durante 20 años.
Como quería ser misionera en la India, embarcó hacia Bengala, donde cursó
estudios de magisterio y eligió el nombre de Teresa (Santa patrona de los
misioneros) para profesar. Ejerció como maestra en la St. Mary's High School de
Calcuta hasta 1948.
Misioneras de la Caridad |
En 1948, envió un pedido al Vaticano para iniciar una congregación
diocesana, sin embargo, en la India existían serias dificultades políticas pues
recientemente se había independizado. Por lo tanto, podría ser mal visto que
una europea se dedicara a los pobres en la situación de aquel entonces. Su
permiso para abandonar el convento se le concedió en agosto de 1948 cuando,
portando un sari blanco de algodón decorado con bordes azules en sustitución de
su tradicional hábito de Loreto, abandonó el lugar solamente con cinco rupias
para ayudar a los más necesitados.
El 7 de octubre de 1950, la Santa Sede le autorizó a inaugurar su nueva
congregación, a la cual denominó las Misioneras de la Caridad. Según Teresa, su
misión desde entonces fue cuidar a «los hambrientos, los desnudos, los que no
tienen hogar, los lisiados, los ciegos, los leprosos, toda esa gente que se
siente inútil, no amada, o desprotegida por la sociedad, gente que se ha
convertido en una carga para la sociedad y que son rechazados por todos». Realizó
esta labor durante 45 años al mismo tiempo que guiaba la expansión de su
congregación, primeramente en la India y luego en otros países del mundo. Las
integrantes de esta congregación, que debían sumar a los votos tradicionales el
de la dedicación a los «más pobres de entre los pobres», lograron una rápida
implantación en la India y en otros casi cien países del mundo.
En 1952 inauguró el primer hogar para moribundos en Calcuta. Con la ayuda de
diversos funcionarios indios, se convirtió un templo hindú abandonado en el
Hogar para moribundos, Kalighat, un hospicio gratuito para los pobres. Tiempo
después, su nombre se modificó a «Kalighat, la casa del corazón puro». Todos
aquellos que llegaban a Kalighat recibían atención médica y se les ofrecía la
oportunidad de morir con dignidad de acuerdo a los rituales de su fe; los
musulmanes leían el Corán, los hindúes recibían agua del Ganges y los
católicos obtenían los últimos ritos. Según ella, «para personas que vivieron
como animales, una muerte hermosa es morir como ángeles, amados y queridos».
Después fundó el centro «Shanti Nagar» para aquellos individuos que padecían la
enfermedad de Hansen, comúnmente conocida como lepra que junto con otras
clínicas similares, las Misioneras de la Caridad proporcionaban atención médica
y alimentos.
Bharat Ratna |
En 1962 obtuvo el galardón «Padma Shari» y en 1969 el premio «Jawaharlal
Nehru» para el Entendimiento Internacional. En 1972 recibió el Premio de la
Fundación Kennedy y en 1979, el Premio Nobel de la Paz, cuya dotación económica
donó a los pobres. En 1980 le otorgaron el galardón «Bharat Ratna», el más
importante entregado a un civil en la India por su labor humanitaria, en
1993 el «Rajiv Gandhi Sadbhavana» y en 1995 el galardón artístico
«Dayawati Modi»
En l986 recibió la visita de Juan Pablo II en la Nirmal Hidray o Casa del Corazón Puro, fundada por ella y más conocida en Calcuta como la Casa del Moribundo. Tras superar numerosos quebrantos de salud, falleció el 5 de septiembre de 1997 víctima de un paro cardíaco. Miles de personas de todo el mundo se congregaron en la India para despedir a la Santa de las Cloacas.
Fue beatificada en 2003 por Juan Pablo II.
En l986 recibió la visita de Juan Pablo II en la Nirmal Hidray o Casa del Corazón Puro, fundada por ella y más conocida en Calcuta como la Casa del Moribundo. Tras superar numerosos quebrantos de salud, falleció el 5 de septiembre de 1997 víctima de un paro cardíaco. Miles de personas de todo el mundo se congregaron en la India para despedir a la Santa de las Cloacas.
Fue beatificada en 2003 por Juan Pablo II.
LA VOCACIÓN MISIONERA DE LAS ORGANIZACIONES ALTRUISTAS, ES INNEGABLE. El éxito de las misiones en la India, solo es posible enfatizando el sincretismo universal del cristianismo laico expresado por Raimon Panikkar: «Me marché cristiano, me descubrí hindú y regresé budista, sin haber dejado de ser cristiano», a fin de derribar barreras entre los hombres por cuestiones de fe. Unido a la empatía que se logra mediante la práctica del amor misericordioso o altruismo, el misticismo y el activismo social intensos, ejercidos por Cristo, a fin de alcanzar la trascendencia humana y la sociedad perfecta. http://es.scribd.com/doc/23972161/EL-CARACTER-UNIVERSAL-DE-LAS-ENSENANZAS-DE-CRISTO-Y-EL-DIALOGO-INTR-ERELIGIOSO
ResponderEliminarMi interés por la Madre Teresa de Calcuta, va más allá de sus creencias religiosas. Recogí su vida en mi blog por su labor humanitaria y entrega a los más necesitados, por supuesto que ella las realizó por su creencia religiosa. No solo los religiosos realizan acciones como las de la Madre Teresa, personas laicas ayudan a los demás, incluso dando a veces su vida por ello. No podemos enfrentarnos por ser de distintas religiones, sino trabajar todas juntas por el bien de la humanidad y si no lo hacemos así, cada uno tendrá que responder ante su Dios por sus acciones.
EliminarUn saludo.