Josefa Amar y Borbón |
Estuvo emparentada con muy ilustres familias de la región, incluso con el Conde de Aranda. En su familia destacan las profesiones liberales como las de médico o abogado y sus hermanos se dedicaron a la milicia y a la iglesia.
Tuvo tutores muy eruditos y fue una lectora apasionada. Para poder satisfacer su ansia de saber, aprendió latín, griego, italiano, inglés, francés, portugués, catalán y un poco de alemán. Le interesaron también las cuestiones bibliográficas. Alcanzó una erudición más que notable, que ejerció con independencia de juicio y no tuvo igual entre las escritoras españolas de su siglo. Conocía toda la obra de los ilustrados e ideólogos franceses y su pensamiento pasó de una Ilustración avanzada a un Liberalismo convencido.
Aborreció la extrema religiosidad de la cultura de la época, mostrándose en todo como una laica convencida. Nunca citó a escritoras religiosas, para ella fue como si no hubieran existido. En ese sentido, su feminismo fue más radical incluso que el de su contemporánea Margarita Hickey. Desaprueba que las niñas se eduquen en conventos de monjas y incluso que existan dichos conventos de monjas.
En 1772 a los 23 años, se casó con Joaquín Fuentes Piquer, un hombre viudo al que apenas conocía y mucho mayor que ella. Joaquín era oidor de la Audiencia de Aragón y murió en 1798 tras una grave enfermedad. Su hijo Felipe murió trágicamente.
En 1782 fue nombrada socia de mérito de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País. En 1787 lo fue de la Junta de Damas, vinculada a la Real Sociedad de Madrid y además socia de mérito de la Sociedad Médica de Barcelona.
Se dedicó principalmente a la traducción de obras extranjeras, mayoritariamente científicas. Entre 1782 y 1789 tradujo la totalidad de la obra del abate Francisco Javier Lampillas en siete volúmenes con el título Ensayo histórico-apologético de la literatura española contra las opiniones preocupadas de algunos escritores modernos italianos. La Sociedad de Amigos del País de Zaragoza, le encargó la traducción del Discurso sobre el problema de si corresponde a los párrocos y curas de aldea instruir a los labradores en los elementos de la economía campestre, acompañado del plan de Francesco Griselini.
En 1783 escribe Aritmética española y traduce Diario de Mequinez, libro que se había puesto muy de moda en Europa.
En la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, de la cual era socia,defendió la independencia y dignidad de la mujer, por medio de su traducción de uno de los libros europeos más famoso sobre el tema, el de Knox, Essay moral and literary y de varios discursos que escribió y pronunció entre 1786 y 1790: Discurso en defensa del talento de las mujeres (1786), Oración gratulatoria...a la junta de Señoras (1787) y Discurso sobre la educación física y moral de las mujeres (1790). En todos estos discursos defiende el Feminismo de la igualdad: el cerebro no tiene sexo y la actitud de las mujeres para el desempeño de cualquier función política o social.
Vivió casi toda su vida en Aragón (Zaragoza, Tarazona, Borja). Murió en Zaragoza en 1833.
En esta página Web podéis leer: Discurso en defensa del talento de las mujeres, y de su actitud para el gobierno, y otros cargos en que se emplean los hombres. Creo que os gustará.
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